El sol comenzó a salir al principio del camino.Retrato anaranjado.
La música a penas se oía de fondo,mejor oír las batallas.
El frío no me cala si voy contigo.
Jamón racionado en media tostada.
Te espió por el espejo,he sido descubierta.Risas mil.
Una cama de agua sin agua y sin barco,solo un saco de dormir.
Escucho a tientas tu respiración,el imsomnio no se alejara,ni siquiera aquí.
Charlas a oscuras,como fantasmas,susurrando.
Los mejores paseos tiritando.
Cerveza rodeada de cornamentas muertas,un poco ambiguo para mi.
Rezando porque llegue el día siguiente y el sueño se pueda cumplir.
Ya llego,impresionante,las lágrimas contenidas ansían salir de los ojos.
No hay tregua,he dejado de ser invisible.
Un beso inusitado en la mejilla y un abrazo de esos que parten el alma.
Dos mil años encima nos contemplan.
Lo que no sabe,es que en ese momento,me acuerdo de ti y me gustaría compartirlo contigo.
El mejor vermouth del mundo en aquel desván con vistas,que valiente por seguirme.
No hay mejores pelos que los de un gorro de invierno,y sobre todo ver como te miran.
Un dedo en el rizo,extraño pero tierno.
Despedida con las manos,que tengas dulces sueños.
Mañana de nieves y de vueltas.
Estrellas blancas en tu camiseta.
El aire huele a yerba.
De puente a puente y tiro porque me lleva la corriente.
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